Emergencias traumatológicas
César Carrillo Cedeño, MVZ, MSc, Especialista en pequeñas especies
Qué sucede cuando nuestra mascota ha sido atropellada?
En lo primero que solemos dirigir nuestra mirada es en vez si nuestro perro o gato continúa caminando. De ser así, seguimos nuestro análisis en ver si camina, o cojea. Pero la realidad es que, en cuando un paciente llega a consulta por este tipo de emergencia, la prioridad será siempre verificar las constantes fisiológicas de dicho animal, se requerirá un muchos casos estabilizarlos, valorando además la permeabilidad de las vías aéreas, que la respiración esté en un plano normal, que la temperatura esté dentro de los rangos esperados, que el animal esté consciente y que no presente hemorragias evidentes o silenciosas.
Para ello se aplica el protocolo de emergencias.
Una vez que está estable el paciente, podemos proceder a realizar maniobras para toma de rayos x, y para la valoración neurológica y traumatológica del mismo.
La traumatología veterinaria adquiere un carácter de prioridad, cuando estamos frente algún tipo de fractura expuesta, que es aquella en la que alguna de las fracciones del hueso emerge hacia el exterior perforando músculos y piel. Dicha fractura como tal se tiene que reparar en el menor tiempo posible, ya que la infecciones se hacen presente a nivel de hueso cuando este emerge hacia el exterior, volviendo el cuadro con un pronóstico reservado a grave mientras permanezca más tiempo esa porción de hueso en el exterior.
De no ser posible en su momento realizar la cirugía, el paciente debe ser estabilizado y el veterinario debe realizar un adecuado manejo de dicha herida, para evitar en la medida de lo posible su contaminación
Inclusive en muchos casos, de ser posible, se sugiere la aplicación de un vendaje, con la finalidad de estabilizar la fractura hasta que se pueda proceder con la cirugía.
El veterinario traumatólogo a cargo, será la persona responsable de indicarte cuál es el paso a seguir, el pronóstico del paciente, y el tiempo aproximado de recuperación, con las debidas indicaciones adecuadas para el cuidado postquirúrgico.